25/8/15

Escéptico recuerdo

Y ya me da por escribir
mezclando colores y vicios
de los que vi por última vez
en la parada donde cogiste el último tren.
Dicen que las despedidas no duelen
si prometes volver a verte,
pero tú no eres de promesas
y yo no soy creyente.
Ahora me despierto
sin el roce del rayo de sol que entraba
por la ventana.
Ya no están tus cuadernos
y lo único que recuerdo de todo lo que
configuraba tu olor
es el gel, que no se ha acabado.
El verano se ha acabado
y me invita a conocer un otoño,
lleno de hojas de papel
que se caen por todo mi cuarto.
Tu recuerdo se insinúa,
una pena que tú no.
Yo te estaba ya esperando,
tú estarás dándote un baño
de esos de cinco medias horas.
Y yo te esperaba,
hasta que me di cuenta
de que sigo sin ser creyente
y a decir verdad,
tú nunca fuiste Dios.

No hay comentarios:

Publicar un comentario