26/4/20

AGUAS

Hoy por fin tengo paz para escribir
cosas tristes pero en calma
cosas imposibles pero que pasan.

Recuerdo cómo era yo misma hace un tiempo,
recuerdo la caricia de un agua cristalina
mientras me sumergía sabiendo dónde estaba el fondo,
sabiendo que era imposible ahogarme.

Ahora me veo perdida en un mar denso,
sin saber qué toco con los pies,
ni si hay algo más en lo profundo.

Disfruto la sal, las olas, la arena entre mis pies...
pero es tan costoso tener que nadar permanentemente,
que a veces siento que mis piernas dejarán de moverse,
que mis brazos claudicarán,
y entonces no habrá servido de nada aprender a nadar.




12/4/20

Nunca más

No recordaré estos días jamás,
me llevaré conmigo la tristeza
y criticaré el fin del mundo de cada alma.

No volveré a ser la misma,
no volveré a teñirme el pelo de mentiras,
recapacitaré sobre la tumba de mis sueños,
y encerraré a los pájaros que escondía en mi cabeza.

Mimaré cada centímetro de la piel del que sufre,
admiraré la incertidumbre desde la esperanza
quizá algún día haya respuestas.

Nunca más escucharé las ideas del poder,
pisotearé su prepotencia
y me reiré de aquel que trate de convencerme.

Ya no hay nada que sea cierto,
sólo el llanto de los que quedan,
sólo la piel de los que volaron,
sólo el céntimo que siempre queda al final del monedero.



1/4/20

Niña

Y es que es así,
el ser humano en el fondo es tosco,
es ruin.

Pero en este mundo infame, 
te pido que llegues a mi alma,
y la pintes con carmín,
quiero que luzca tan guapa 
como eres tú sin mí.

No llores más, no busques la verdad,
solo baila, fluye, flota,
y no mires atrás

Compañero

Siempre me gustó tenerte,
aquí, allí...o en mi cabeza.
Me gustaba pensar en ti como un templo,
al que voy cuando estoy enfermo.
Pensaba que todo era más fácil en tu almohada,
sin percatarme de que yo iba envenenando cada milímetro de la cama.
Sin darme cuenta de que todo lo que tú me curabas,
se volvía en tu contra.
Y mira sí, te usé para sanarme,
me aproveché de la calidez de tus ojos,
del don de tu alma,
incluso te convertí en malabarista de mis miserias.

Soy la cicuta que confundiste con canela,
soy ser humano intoxicado de tu ausencia.
Y ahora por fin me doy cuenta,
de que eres libre para vivir sin mis mareas.